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Venezuela Ecosocialista:
un debate pendiente

Prólogo del libro por Miguel Angel Nuñez

por William E. Izarra
Caracas, Venezuela


Venezuela Ecosocialista: un debate pendiente por Miguel Angel Núñez

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Vivimos en un proceso político estimulador de emociones. La praxis por alcanzar nuevos estadios de vida en la sociedad se fusiona con los alientos que dimanan del liderazgo conductor y de las ideas inspiradoras de nuevos paradigmas. Alma y materia, espíritu y potencia, conjunto de sensaciones que se transforma en fuerza. Así tendremos distintos ímpetus descubiertos por el ser que aparecen en su interior en tanto exista emocionalidad creadora. La suma de esa vitalidad representada por F1, F2, F3 hasta Fn se constituye en el conjunto de vectores de la morfogénesis (fuerza integral para luchar con infinita valentía a favor de la Revolución Bolivariana, gesta creadora de nueva forma de vida y nuevo marco teórico para interpretar al mundo).

Algunos de estos vectores son, por ejemplo: (F1) el contacto espiritual con nuestros libertadores, antepasados indígenas e historia política; (F2) las nuevas organizaciones sociales y comunitarias; (F3) la creación de la cultura emancipadora; (F4) la investigación dirigida a producir nuevas tecnologías; (F5) la práctica de solidaridad fundamentada en el amor al prójimo; (F6) la asimilación teórica y la praxis innovadora del ecosocialismo como parte del Socialismo del Siglo XXI; (F7) la simbiosis que ocurre entre el líder y la multitud en un acto de masas. Estos vectores de la morfogénesis la convierten en una fortaleza multivariable que se transforma en energía inmutable.

La presencia de la fibra permanente se concreta al unir en un solo cuerpo de resolución alma, razón y corazón. Tronco energético potenciador de actos superiores a nuestra vitalidad física que nos empuja a confrontar adversidades, derrotar inmensos obstáculos y someter las objeciones encontradas que se oponen a nuestras metas. Por ejemplo: (-1) la desestabilización de la oposición reaccionaria reflejada principalmente en la guerra mediática de quienes tienen el poder de la comunicación radial, impresa y televisiva (no debemos creer en los análisis que hacen a diario. Su marco teórico así como sus valores e ideas son contrarias a las del revolucionario. Jamás lo que hace el gobierno será bueno para ellos. Se basan en el capitalismo, mientras el Proceso Revolucionario lo hace en el socialismo. Son visiones del mundo opuestas); (-2) los valores, hábitos y costumbres aún vigente en nuestra sociedad de consumo que produce la alienación del ser (pérdida de la conciencia crítica); (-3) la matriz de opinión internacional que manejan las transnacionales de la comunicación en contra del gobierno nacional (en Venezuela no hay democracia y el gobierno es aliado del terrorismo); (-4) el apego al modelo de la agricultura corporativa extractiva y contaminante.

Estos desafíos son para la energía morfogenética su ejercicio de combate cotidiano. Confrontación a la que concurre el revolucionario por propia convicción; y por muy ilimitadas que sean las dificultades que se presenten la energía morfogenética multiplica la acción para liquidar a la contrarrevolución. Siempre las fuerzas (F) superarán a los oponentes menos (-). He allí la bondad infinita de la morfogénesis. Por generar la voluntad consciente y en estado de aceleración, el revolucionario responderá la confrontación directa para desbaratar a la contrafuerza oponente; y de no lograrlo, no se rinde. Comenzará entonces la búsqueda de los caminos indirectos. Ya no es la recta lo más cercano. Aparecerán curvas, caminos sinuosos, avances y retrocesos; pero, su energía reflejada en la plena disposición a mantener constante su brega le llevará a superar los obstáculos encontrados, dominar la situación y lograr el propósito de someter a la adversidad. A mayor nivel de morfogénesis mayor posibilidad de entender y luchar por el Proceso Revolucionario.

Estas reflexiones preliminares solo pueden hacerse en el marco de un proceso transformador, de profunda inspiración creadora y de plena disposición a tomar el duro y largo camino de la lucha por establecer nuevos paradigmas de vida. La Revolución como acto de creación humana en una fuente permanente de fuerza morfogenética para alcanzar los cambios de estructura. Eso es lo que produce “Venezuela Ecosocialista” de Miguel Ángel Núñez. Torrente de energía que nos nutre de conocimientos y aliento a fin de buscar la consolidación de nuevas relaciones de producción en la estructura alimentaria del colectivo nacional. “Venezuela Ecosocialista” es la teorización del nuevo entender y hacer del modelo productivo agrícola en la Revolución Bolivariana; el cual, por su rico contenido teórico-práctico e inédita propuesta, se transmuta en centrifugadora de morfogénesis.

El ecosocialismo de Miguel Ángel Núñez (simbiosis de ecología y socialismo) aplicado a Venezuela se convierte en una categoría de la tesis ideológica del Socialismo del Siglo XXI; y establece la viabilidad de su asimilación en tres dimensiones de la práctica agrícola productiva:

1. la política, ya que su elaboración conceptual fundamentada en experiencias y años de estudio rompe los esquemas existentes de la “agricultura corporativa extractiva y contaminante”, para asumir los fundamentos de la agroecología sustento del ecosocialismo;

2. la técnica, por la precisión y especificidad de los factores geográficos y ambientales rigurosamente elaborados; y las denominadas eco-bases, estructuras potenciales existentes en Venezuela para la producción de alimentos desde la práctica agroecológica;

3. la dimensión creadora que genera elementos innovadores a través de la acción operativa de las redes agroecológicas, para hacer del ecosocialismo un componente primario de la teoría revolucionaria en gestación y un factor de factibilidad en su materialización dentro del contexto del Bien Común del pueblo.

Los planteamientos de este libro conducen a abrir espacios para la investigación y, en consecuencia, adentrarnos en lo que viene desarrollando Núñez desde hace años y en otros estudios citados en su bibliografía. Fusión de ideas que conceptualizan el ecosocialismo como la vía alternativa para parir una nueva civilización basada en los argumentos básicos del movimiento ecológico y en la crítica marxista de la economía política. El ecosocialismo se opone al progreso destructivo capitalista y en contraparte crea una política económica basada en criterios no monetarios y extraeconómicos a fin de satisfacer las necesidades sociales y el equilibrio ecológico. Por lo tanto, el objetivo del ecosocialismo es fundar una nueva vida, otra sociedad sustentada en la racionalidad ecológica, en el ejercicio pleno de la democracia directa, en la equidad social y el predominio del valor de uso sobre el valor de cambio. Lo que requiere:

a) propiedad colectiva de los medios de producción (pública, cooperativa o comunitaria);

b) planificación democrática que permita a la sociedad definir metas de inversión y producción; y

c) una nueva estructura tecnológica de las fuerzas productivas.

Es decir, un cambio radical en lo político, lo social y lo económico inequívocamente revolucionarios. En consecuencia, una nueva vida que genere un nuevo modelo económico tiene que basarse en la sustentabilidad de la producción de alimentos.

Al respecto, dice Núñez: “…estamos convencidos que una de la partes más dinámica de esa nueva economía ha de ser la agricultura sustentable. Dicha propuesta, nació en 1999 con la nueva Constitución Bolivariana, acuñada en el artículo 305. Se le daba a la sociedad venezolana el rango constitucional a la agricultura nacional. Primer país en Latinoamérica contar con dicho privilegio. ¿Qué significa para los venezolanos el que su sociedad le haya dado el rango constitucional a la agricultura sustentable? Implica que cada venezolano debe y tiene que conocer como se producen los alimentos; como se distribuyen y comercializan; como se transforman y como se consumen. En otras palabras saber la alta calidad biológica de los alimentos que la sociedad esta ingiriendo…” (Núñez, Miguel Ángel, La Reforma Constitucional Venezolana y la Agroecología, Publicado en In Motion Magazine 23 de agosto, 2007)

Más especificidad de la agricultura sustentable la encontramos en esta síntesis del ecosocialismo determinado por los principios agroecológicos: “… Es darle el justo merecimiento a los saberes que histórica y culturalmente le han pertenecido a nuestros campesinos y que lo identifican con su espacio, su corresponsabilidad social, ambiental y local-regional. Todo ello por el Bien Común, como lo es alimentarse sana y armónicamente con el ambiente.”

Esto es, pues, pura revolución y por lo tanto energía potenciadora para implantar sus postulados.

“Venezuela Ecosocialista” aparece en un momento coyuntural del escenario político venezolano del 2010, cuando precisas y significativas circunstancias se cruzan generando puntos críticos para la continuidad y profundización del Proceso Bolivariano, valga decir:

1. las deliberaciones y elaboración de políticas por parte de los delegados al Congreso del PSUV, quienes deben estudiar el contenido de este libro para que el partido, como instrumento del pueblo, asimile e inicie al interior de su seno y en sus relaciones con las autoridades de su competencia la justa interpretación y realización del nuevo modelo productivo agrícola basado en el ecosocialismo.

2. las elecciones para los nuevos diputados a la Asamblea Nacional, por lo que los candidatos tienen que posesionarse de estos conocimientos y convertirlos en guía permanente al ingresar en la nueva Institución a partir de enero del 2011. Esto tiene que permitir la consolidación de una estructura jurídica por medio del cuerpo de leyes socialistas que le de soporte al nuevo modelo de producción agroecológica.

3. la apertura del colectivo nacional al aprendizaje por vía del estudio y la lectura que obliga a quienes luchan por el socialismo a buscar las vías para que el Centro Nacional del Libro (Cenal) dentro del plan de lectura, la Editorial el Perro y la Rana y demás componentes culturales involucrados con los programas formadores del hombre nuevo, consciente y crítico, reciba este material a fin de digerirlo y hacerlo parte de sus metas a alcanzar en su medio ambiente.

4. las exigencias que hace el líder del proceso a las autoridades nacionales, regionales y locales en avanzar con pasos firmes en la construcción del Socialismo del Siglo XXI. A estas autoridades hay que diseñarles un plan de alfabetización ideológica que incluya de manera específica la esencia de “Venezuela Ecosocialista” para viabilizar el ecosocialismo en sus respectivas entidades territoriales.

5. la existencia de un significativo número de unidades del poder popular para la difusión político-ideológica que asumirían el contenido que aqui se presenta y lo convertirían en programa de enseñanza en sus eventos de formación e investigación.

Todos estos cinco momentos son propiciadores de la conciencia crítica del colectivo nacional con la finalidad de avanzar en la construcción del SSXXI y específicamente en creer, promover, enseñar y supervisar el ejercicio en la dimensión social de nuestro espacio territorial del nuevo paradigma como lo es el ecosocialismo en Venezuela. El 2010 reta a los revolucionarios que luchamos por consolidar el Proceso Bolivariano a debatir las ideas y ofertas socialistas. Espléndida oportunidad para que presentemos en el escenario político de ese año, cuando la oposición y la contrarrevolución buscarán obtener el 50% de la Asamblea Nacional, el ecosocialismo como el modelo de las nuevas relaciones sociales de producción fundadas en los principios y valores de la agroecología y la sustentabilidad, que no es otra cosa que la cultura por la vida.

“Venezuela Ecosocialista” de Miguel Ángel Núñez es un libro que resume veinte años de una serie de vivencias, experiencias y prácticas en el área de la agroecología, orientadas por la aplicación de metodologías participativas en el apoyo del diseño y consolidación de modelos alternativos en organizaciones sociales de la producción a nivel de pequeños y medianos productores campesinos. Además, en esto lapso su bagaje intelectual y su talento para inventar ha generado seis textos publicados en las áreas de la agroecología, energía, ambiente y desarrollo rural sustentable. Apoyados por más de cien artículos científico-técnicos dedicados a la ecología, agricultura tropical sustentable y la política ambientalista.

Miguel Ángel Núñez se convierte con este nuevo aporte de producción de ideas en un hito creador de paradigmas que contribuye con la definición conceptual de la tesis ideológica del SSXXI. Eso, además de ser muestra de su significativa capacidad innovadora y de clara identificación con la Revolución, es un factor de satisfacción y orgullo nacional pues tenemos a un venezolano elaborando teoría inédita aplicada a la realidad venezolana. Acto que compensa la variedad de autores no nacionales que escriben sobre Venezuela y su revolución.

La lectura de “Venezuela Ecosocialista” es sin duda un estimulador de energía morfogenética. Se crece el espíritu revolucionario y se infla la fuerza integral de nuestro ser (alma, razón y corazón) para multiplicar la disposición a no dejarnos vencer por ninguna contra-fuerza adversa que se nos presente. Leer acerca de ecosocialismo aplicado a Venezuela y saber que eso desmontará el modelo capitalista de producción agrícola, eleva la moral y nos vigoriza la capacidad de lucha tanto para inventar por vía de la agroecología como para vencer a la contrarrevolución que no acepta al socialismo y sus formas metodológicas gestadoras del ser y la vida nuevos. Por eso es morfogénesis, porque desarrolla una inmensa energía cargada de voluntad infinita y sabiduría inmortal para crear una nueva forma de vida, de luz, de armonía espiritual y de felicidad.

-- William E. Izarra
Caracas, 30 de Noviembre de 2009

Publicado en In Motion Magazine 18 de septiembre, 2010

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